Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne.
Genesis 2:24
El matrimonio y la vida familiar son parte del magnífico plan de Dios para la creación. Desde la fundación del mundo, desde los comienzos mismos de la vida, Dios quiso que el hombre y la mujer se casaran y tuvieran hijos como fruto de su amor.